¿Sabes a que edad tus hijos empiezan a consumir porno?

El porno no es sexo, es violencia

 La pornografía es la escuela de la violación. ¿Sabes que hay niñas y adolescentes que sufren daños psicológicos, sexuales y físicos, algunos de ellos de por vida? ¿Sabes que hay jóvenes que desarrollan impotencia porque sólo se excitan con contenidos cada vez más violentos? No podemos cerrar los ojos ante los problemas ¿Qué vas a hacer al respecto?

La pornografía no transmite un modelo educativo basado en la igualdad y la libertad sexual, sino en el abuso de poder y en la violencia. El incremento de la violencia sexual tiene una relación directa con el consumo de estos contenidos pornográficos y violentos, plenamente accesibles y gratuitos para los menores, y cómo se han constituido en un referente que es necesario dificultar y desarticular para retomar una educación afectivo sexual respetuosa, sana e igualitaria.

Este consumo sólo favorece a la industria pornográfica, y está poniendo de manifiesto el déficit que sufren de una adecuada educación afectivo-sexual tanto en el entorno familiar como en los centros educativos. Tanto las familias como el profesorado han de asumir su responsabilidad en una educación libre de violencia de los y las menores. 

La pornografía a la que acceden libre y habitualmente dista mucho de las características repetitivas e invariables que nuestro imaginario como adultos rememora, y que por tanto es necesario revisar y actualizar nuestro discurso adulto para ser realmente de nuevo una referencia adecuada y significativa para la infancia y la adolescencia.

Es necesario prevenir el incremento exponencial de las adicciones a la pornografía y al modelo de sexualidad abusivo y violento que la pornografía propone y explota a través de la industria del porno.
Si tu hija o hijo ha sufrido violencia sexual
Escríbenos o llámanos al servicio de asistencia a víctimas de agresiones sexuales de ADAVAS
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